Las lentes de contacto son lentes que se colocan directamente sobre la superficie del ojo para compensar los defectos de graduación, además de otras alteraciones oculares (ectasias corneales, malformaciones por traumatismos, etc.).
Actualmente existen numerosos tipos de lentes de contacto, de las cuales las más utilizadas son las blandas de reemplazo diario o mensual, utilizadas para corregir defectos de graduación como miopía, hipermetropía y presbicia. Mientras, las lentes de tipo rígido (corneales y esclerales), semirrígido e hibridas suelen reservarse a casos especiales.
Una de las aplicaciones más interesante e innovadora de las lentes de contacto es la ortoqueratología, que consiste utilizar unas lentes de contacto especiales durante la noche (mientras dormimos) para compensar los defectos de graduación (miopía, hipermetropía o astigmatismo) produciendo un moldeo corneal que compensa el defecto de graduación permitiendo ver bien durante el día sin necesidad de utilizar tipo de corrección. La técnica de orto-k permite además disminuir el avance de miopía de forma efectiva en niños y adolescentes como han demostrado numerosos estudios científicos.
La compensación de la presbicia o vista cansada mediante lentes de contacto también ha experimentado grandes avances. Hoy en día existen numerosos tipos de lentes que permiten ver bien a todas las distancias, permitiéndonos escoger en cada caso la alternativa que mejor se adapta al usuario en función de su estilo de vida y sus necesidades visuales, de manera que podemos leer bien sin gafas.
Las lentes de contacto también permiten compensar defectos visuales producidos por irregularidades corneales (ectasias, trasplantes, etc), en cuyos casos es necesario utilizar lentes especiales que se ajusten a las características de cada paciente. Es el caso de las lentes rígidas esclerales y las híbridas, que son los últimos avances en este campo de la contactología.
La baja visión es una especialidad de la optometría dedicada a proporcionar ayudas visuales a personas con problemas de visión que no pueden corregirse porlos modos habituales (gafas, lentes de contacto, cirugía, etc.). Gracias a estas ayudas los pacientes pueden llevar a cabo sus actividades diarias más fácilmente y por lo tanto disfrutar de una mejor calidad de vida. Estas ayudas van desde las lupas de mano convencionales y los filtros de absorciónselectivo, hasta los telescopios y los circuitos cerrados de televisión dotados de la tecnología más avanzada.
El diagnóstico por imagen es una de las especialidades que más han avanzado en los últimos años en el estudio de la salud ocular, sobre todo del polo posterior (retina y nervio óptico), gracias a los avances tecnológicos. Esta técnica consiste en evaluar el estado de las estructuras oculares a través del análisis de las imágenes proporcionadas mediante determinadas técnicas, principalmente retinografía y tomografía de coherencia óptica (OCT). Esta última tecnología, presente en nuestro centro, es con diferencia la más efectiva para la evaluación del polo posterior ocular, ya que permite detectar cualquier alteración con una sensibilidad y especifidad muy altas, de forma que se puede prevenir, corregir y tratar patologías tan importantes como el glaucoma o la degeneración macular asociada a la edad (DMAE). Dando soporte al los hospitales de referencia cuando es necesario.